lunes, 31 de marzo de 2008

ya volvi

Ya regresé de mis vagaciones , me fui a Oaxaca y me la pase muy bien , pero de eso les contaré en la siguiente entrada.Ya extrañaba mi rancho, la regadera y el agua caliente a la hora que quiera, mi cama y mi cuarto oscuro, a mis hermanas dando guerra, extrañaba mi santisima rutina, tanta gente que odia las rutinas, la monotonia y eso, pero a mi me da seguridad, ya se que va a pasar ya se que tanto se tarda la computadora en prender y a que hora bajar a lavar los trastes. Extrañaba la gente pues. de mi viaje les cuento luego fue una gran experiencia

martes, 11 de marzo de 2008

un preloca prometido

En el Nuevo Brasil solo el encargado y las meseras podían hablar con ella, era una mujer que pasaba sus noches vestida de tehuana bebiendo café, esperando quien sabe que cosa, la vuelta del tiempo tal vez, solo hablaba para pedir cafe o cigarros, si algun novato en el cafe le dirigia la palabra le mentaba la madre, y asunto arreglado, de dia vivia en una casa que era mas bien un taller repleto de lienzos, caballetes, tubos de pintura, cajas de pasteles, colores, rollos, fotos y posters , lo curioso, era que la misma pintura se repetia aqui y allá, era un perfeccionista, y tenia 30 años intentando que esa pintura fuera perfecta asi que todo ese tiempo habia trabajado en ella. Le encantaban los perros, a esos si les hablaba como si fueran sus hijos, tenia 5, los cuidaba y los dejaba dormir en su cama. Su hermana, la visitaba una vez a la semana, hiba a tirar las colillas y a lavar los trastes por que ella nunca lavaba trastes. cuando tenia un bloqueo creativo, hablaba sola, incoherencias, recitaba canciones, conversaciones antiguas, comentaba una pelicula , se peleaba con sus fantasmas o con burocatas escolares, y cuando al fin sacaba aquello de su sistema podía seguir con su rutina.

lunes, 3 de marzo de 2008

lunes

Despues de tanto ruido, todo se calmo. se repente se oyó un clac, clac, clac, alguien con zapatos de tacón en la biblioteca, abrían la puerta y se escuchaba un zumbido, pero que era, volteaba de una lado para otro. Por la ventana, se movían los árboles y las palmeras furiosos y resignados, el viento los sacudía, con furia, pero sabiendo que no los iba a sacar de la tierra, así que el zumbido era el viento, reseco y caliente. De pronto me alcanzó el rumor de una loción conocida, pero la maraña en mi memoria olfativa es muy grande, no es alguien es el ambiente el que huele así, este clima, que demanda que recordemos que estamos en cuaresma, con el sol llenándolo todo y ni una triste nube con forma de perro donde guarecernos.

lunes

Despues de tanto ruido, todo se calmo. se repente se oyó un clac, clac, clac, alguien con zapatos de tacón en la biblioteca, abrían la puerta y se escuchaba un zumbido, pero que era, volteaba de una lado para otro. Por la ventana, se movían los árboles y las palmeras furiosos y resignados, el viento los sacudía, con furia, pero sabiendo que no los iba a sacar de la tierra, así que el zumbido era el viento, reseco y caliente. De pronto me alcanzó el rumor de una loción conocida, pero la maraña en mi memoria olfativa es muy grande, no es alguien es el ambiente el que huele así, este clima, que demanda que recordemos que estamos en cuaresma, con el sol llenándolo todo y ni una triste nube con forma de perro donde guarecernos.